Unas 20.000 personas se reunieron para disfrutar de la segunda edición del Festival Buenos Aires Trap que tuvo como puntos fuertes el cierre con los argentinos Duki, Khea y Nicki Nicole y el español C Tangana.
El encuentro de música urbana más grande del Cono Sur arrancó temprano con el concierto del argentino Lautaro LR, lo siguió la correntina Sofía Hervier y La Queen, figura trans de Fuerte Apache, que se despachó muy duro contra Carlos Tevez.
En este segmento vespertino del festival el punto fuerte lo pusieron las mujeres como Sara Hebe, que trajo sus rimas militantes y su postura antisistema que cosechó buenos resultados. También concentró la atención de la gente, Seven Kayne.
Luego subió al escenario una de las figuras femeninas en ascenso Dakillah y después llegaron los primeros invitados internacionales los chilenos Polima West Coast y Young Cister, y el español Delaossa.
El crédito local Lucho SSJ de apenas 17 años tuvo una gran recepción y se mostró listo para dar el próximo salto.
El momento en que el de trap y reggaetón se dieron la mano con el hip hop, el funk y el neo soul llegó de la mano de Catriel y Paco Amoroso junto a su ATR band.
La gente quedo extasiada y los jóvenes saltaban en un pogo descomunal que se mantuvo cuando subió Neo Pistea, otro valor argentino, responsable del hitazo del 2018 “Tumbando el club”.
Luego, fue el turno la joven Nicki Nicole de 19 años, que con su voz bien en estilo R&B subió con una ajustada banda que le permitió ponerle romance a la noche.
La madurez y el profesionalismo llegaron de la mano del español C Tangana, una figura trascendental de la música urbana en la península ibérica.
Lo siguió CRO, de la filosa Barderos Crew, un grupo de raperos venidos de Neuquén que junta al trap con el gangsta rap y le pone mucho contenido social a las letras.
Más tarde subió el crédito de Virreyes, Khea que arrasó con sus versiones de “Loca”, “Screenshot”, “Vete”, “Empresario”, “Como le digo”, “Tengo 30” y “Animo”.
Más tarde, Duki, el niño malo de la escena local, vino a pura energía, fuerza y muchísimo carisma fue aclamado por miles de jóvenes saltando hasta esta madrugada con clásicos como “She dont give a fo”, “Vampiros”, “Hello Cotto”, Hijos de la noche”, “Shorty” y “Goteo”.
El momento de la comunión llegó sobre el final con Duki, Khea, Lucho y otros artistas sobre el escenario cantando el hit “Tumbando el club” y destrozando un vehículo pintado como un móvil policial a palazos en “Hitboy”, una de las canciones que simboliza el momento que vive la música urbana argentina.